a 60 años

del primer láser

Fecha: 30 de Septiembre de 2020

Hace 60 años el primer láser de la historia funcionó con éxito produciendo un haz luminoso de color rojo. En ese entonces, pocas personas hubieran podido imaginar la importancia científica y tecnológica que esta novedosa fuente de luz iba a cobrar en beneficio de la humanidad, y la manera en que este invento iba a revolucionar nuestro estilo de vida.

Fue en 1960 cuando el científico norteamericano Theodore Maiman logró tal hazaña; su láser estaba hecho de rubí, nombre que se da al mineral rojizo del que está hecha un tipo de piedra preciosa usada en joyería. Era la primera vez que se lograba obtener una emisión en un color visible al ojo humano (ya antes se había conseguido pero en la región de las microondas, que no podemos ver a simple vista).

Para dar a conocer su logro a la comunidad científica mundial, Maiman envió un reporte de su trabajo a la prestigiada revista Physical Review Letters, pero fue rechazado por el comité que lo revisó. Esta decisión pudo deberse quizá al poco entendimiento que se tenía en aquel momento sobre las implicaciones de esta contribución. Pero esto no desanimó a Theodore Maiman, quien envió después su reporte a la reconocida revista Nature que finalmente lo publicaría el 6 de agosto de 1960.

Resulta curioso recordar que en un inicio se consideraba al láser como una “solución en busca de un problema”, pues no se alcanzaba a vislumbrar su utilidad práctica. No paso mucho tiempo antes de que ese “problema” llegara, y luego llegaran muchísimos más, convirtiendo al láser en una herramienta imprescindible, que ha sido y sigue siendo ampliamente utilizado en diversos campos, como en la medicina, las telecomunicaciones, el procesamiento de materiales (corte, grabado, soldadura, etc.), y el de las mediciones de alta precisión para la manufactura avanzada de piezas en la industria y el control de calidad, por mencionar sólo algunos. Es difícil imaginar algún sector productivo que no se beneficie del empleo de algún láser. Los láseres están por todos lados, pero generalmente pasan desapercibidos a excepción de los espectáculos de luces que se presentan por ejemplo en algunos conciertos musicales.

Hoy en día se cuenta con láseres de muy diversos tamaños, potencias y longitudes de onda de emisión, cada uno de los cuales resulta más conveniente para ciertas aplicaciones. Algunas de ellas han alcanzado desde hace unas pocas décadas al hogar y la vida diaria. De hecho, casi todos hemos hecho uso de aplicaciones del láser, siendo algunas tan cotidianas como la lectura de códigos de barras de los productos en los supermercados, al escuchar un CD o ver una película en DVD, al usar un apuntador láser o ¡al navegar por Internet! En esta supercarretera de la información, los vehículos son pulsos de luz que viajan por fibras ópticas que transportan a lo largo del planeta la información que solicitamos o que compartimos, ya sea en forma de texto, imágenes, video, voz, etc.

En el CIO los láseres no solamente son indispensables para el trabajo científico, de servicios y desarrollo tecnológico que realizan muchos técnicos e investigadores, sino que además algunos de ellos los han llegado a fabricar desde hace tiempo, o los están diseñando actualmente para ciertas aplicaciones médicas e industriales que veremos en los próximos años.

¿Cuántas nuevas aplicaciones de los láseres estarán por llegar antes de que esta útil fuente de luz cumpla su primer siglo de existencia?